domingo, 29 de noviembre de 2009

hoy he decidido morir

2:27 a.m. Te sueño, te veo, te sigo, te siento, te deseo. Me desprendo, salgo volando por la ventana y tantos días quedan atrás.

7:30 a.m. El despertador suena, lo apago.

7:40 a.m. El despertador suena nuevamente. Abro los ojos, mira a mi lado, estoy acompañada. Acompañada en cuerpo pero abandonada en alma. Comprendo que acabo de volver a la realidad, a la maldita y jodida realidad. A esa realidad que no quiero, que desprecio, que detesto por hacerme sentir un ser vacío y malévolo.

Vacío por ser incapaz de sentir, malévolo por no tener el poder de corresponder, por verlo y pensarlo con otra cara, con otro cuerpo, con otros labios, con otro nombre; por pensarlo diferente, por querer a alguien diferente, por necesitar a ese alguien que ya no está en este mundo terrenal, por la cobardía que me hace callar.

Tomo una decisión.
No me queda mas que razonar, me veo orillada a hacer lo mas coherente que mi cerebro asimila, lo mas lógico que la razón sustenta. La única forma de fundirme plenamente con ese fantasma nocturno y salvaje, es dejando de estar presente en materia, en cuerpo… en mortalidad...

He decidido dejar de vivir enamorada de un fantasma que me visita por las noches con frenesí y pasión; esa esencia ausente que me hace viajar a un universo paralelo en el que sólo allí podemos fundirnos en el más ardiente de los besos, en el más siniestro de los infiernos; esa dimensión desconocida, el espacio sideral, donde no existen techos ni paredes, donde podemos volvernos un sólo ser, donde podemos dejar de existir.


Hoy he decidido morir, porque al salir cada día el sol, vuelvo a una realidad en la que no logro comprender que hago tolerando la vida en este mundo lleno de mentiras e incoherencias, de falsedades e hipocresías; este mundo que al momento de despertar cada mañana me ata, me limita y me convierte en un ser terrenal, en un simple mortal, en un montón de órganos, venas, arterias, huesos y materia no tan gris.
.
.
.
Hoy he decidido morir...

para finalmente comenzar a vivir…

más allá...

donde no hay tiempo...


ni límite…



Mi hora ha llegado...

Si de algo he de morir, que sea de amor…


Rosalba Rivadeneira Orozco
Perdición esquina con cinismo,
interior 3ª.
Verano 1947


2 comentarios:

javiernesto. dijo...

me encanta la parte de los besos apasionado, ha. Mañana es lunes, un buen día para empezar propósitos de finesdesemana y sobre todo, empezar a vivir, diferente, con una sonrisa, con un sol en la cara de no-lunes.

Anónimo dijo...

Wow escribes muy padre :D